Cuando operamos un sistema con varios contratos, las reglas de entrada y cierre de posiciones pueden administrarse empleando diferentes criterios de distribución temporal. Este proceso tiene importantes consecuencias sobre el comportamiento de una estrategia. En el presente artículo revisaré las principales metodologías de reescalado y sus posibles beneficios.
El reescalado de la posición −o "piramidación parcial"− consiste básicamente en fragmentar el tamaño máximo permitido a una posición en varias entradas o cierres múltiples en alguna de las tres siguientes situaciones:
(1) Cuando se satisfacen de manera consecutiva las reglas de entrada al mercado.
(2) Cuando, dadas unas condiciones, las órdenes se ejecutan en ráfagas de uno o más contratos, siguiendo un patrón temporal.
(3) Igual que el anterior, pero siguiendo un rango establecido de precios.
En la imagen inferior podemos ver una activación múltiple basada en reglas.
En este caso bastará con habilitar (en la mayoría de las plataformas) el modo de trabajo de múltiples entradas por dirección, y asignar un valor "n" a dicho número.
En ninguna de las tres modalidades descritas existe garantía de que se alcance el número máximo de contratos en una determinada posición. Por ello, al hacer pruebas de backtest, encontraremos situaciones en las que se completa parcial o totalmente el tamaño máximo de la posición. Este es el motivo por el que denominamos a esta técnica piramidación parcial.
Para cada una de las alternativas descritas, existen diversas variantes que conviene estudiar con detenimiento:
A) Entrada secuencial y salida única. En este caso, lo que estaremos haciendo es diluir el riesgo de ejecuciones adversas eligiendo puntos diferentes de entrada al mercado, mientras que cerraremos todas las posiciones cuando se alcanza el objetivo de beneficios o pérdidas establecido para el conjunto de la posición o tiene lugar un cierre horario (en sistemas intradía). Por ejemplo, supongamos un MM Stop sencillo de valor monetario fijo; en tal situación estaremos cerrando la posición si la pérdida combinada de todas las entradas alcanza ese valor.
B) Entrada única, salida secuencial. Caso inverso al anterior. Ahora estaremos entrando, al verificarse las reglas, con el número máximo de contratos, pero cerraremos posiciones de manera escalonada sólo cuando se cumplan las condiciones de cada cierre. Veamos un ejemplo sencillo: Abrimos una posición de compra con tres contratos del FDAX (C1, C2 y C2) y establecemos un MM Stop basado, por ejemplo, en múltiplos del ATR (x), de tal manera que:
- Stop C1 = Precio de entrada - ATR(x) * 1,5
- Stop C2 = Precio de entrada - ATR(x) * 2
- Stop C3 = Precio de entrada - ATR(x) * 2,5
En una situación así, ¿qué nos podemos encontrar? Por un lado, que un movimiento brusco y adverso del mercado barra nuestras tres posiciones. Pero, lógicamente, también puede ocurrir que nos saque de una o dos de ellas, y, a continuación, se produzca un giro en la tendencia que acabe generando beneficios en el resto de la posición, incluso en el resultado final. De este modo, con lo que estamos jugando (da lo mismo al alza o a la baja, con objetivo de pérdidas o beneficios) es con la posibilidad de que el devenir del mercado siga su insondable movimiento errático. Esa técnica resulta especialmente interesante para series de stops muy ceñidos.
C) Entrada y salida secuenciales. Aquí, como podrán imaginar, las alternativas posibles se complican mucho más. Lo normal es asignar etiquetas a una cadena de órdenes de entrada que activa elementos de otra cadena en el subsistema de cierre de posiciones. De este modo, tenemos:
- Entrada C1 → Cierre para C1
- Entrada C2 → Cierre para C2
- Entrada C3 → Cierre para C3
La flexibilidad del planteamiento es enorme, pues los valores de activación (C1...C3) pueden basarse en reglas discretas de entrada/cierre a mercado o en triggers incorporados a órdenes en stop o limitadas, y, en este último caso, cabría la posibilidad de obtener soluciones a las variables de la matriz (EC1, CC1; EC2, CC2...) mediante técnicas de optimización.
Todavía existen escenarios más complejos, por ejemplo: Entrada y salida secuenciales más control dinámico de la posición. En este caso el resultado P/L (profit /loss) de los primeros cierres afectaría a los parámetros / reglas que determinan los siguientes. Pero esto llevaría nuestro planteamiento por unos derroteros sobre los que ahora no quiero extenderme. Entre otras cosas porque, aunque he oído hablar sobre algoritmos de piramidación autoajustable o "inteligente", actualmente no dispongo en mi modesta "caja de herramientas" de nada parecido.
También quiero dejar claro que no existe evidencia alguna sobre si estas técnicas mejoran, en conjunto, a las estrategias habituales de "todo o nada" más algoritmo de gestión del tamaño de la posición (f óptima, fixed fraction, fixed ratio, múltiplos de R, etc.).
Posibles ventajas de las técnicas de reescalado:
1. Mayor sensibilidad a los cambios del mercado.
2. Posibilidad de controlar de manera más activa el momento y tamaño de la posición.
3. Disminución de la exposición total del sistema / cartera.
4. Como consecuencia de lo anterior, mayor capacidad de apalancamiento.
5. Menor riesgo global -por dilución de las posiciones - de exposición al mercado.
¿Existen sistemas especialmente apropiados para esta metodología? Sí, particularmente los de mayor cadencia operativa o "gatillo fácil", debido, entre otros factores, a que los movimientos erráticos del mercado se manifiestan más en tramos muy cortos. Pero también es verdad que cada sistema es un todo, y conviene analizarlo como tal. En consecuencia, sólo el análisis detenido de los resultados de operativa arrojará alguna luz sobre la viabilidad y pertinencia de aplicar alguna de las múltiples variantes del reescalado de la posición.
En la siguiente entrega analizaremos en profundidad los beneficios (y posibles trampas) de aplicar algunas de estas técnicas, empleando, como conejillo de indias, un sistema sencillo de tipo intradiario.
Andrés A. García,
© Tradingsys.org, 2009.