Para responder a esta pregunta es preciso analizar un concepto que ahora está en boca numerosos seguidores de la operativa sistemática: El Effective Range (ER). Se trata de una medida simple, pero tremendamente realista, sobre las oportunidades de obtener beneficios en diferentes mercados con un rango decreciente de volatilidad intradiaria. Su fórmula es muy sencilla:
Por ejemplo, si en el E-mini S&P el valor del punto son 50$ y el rango medio de fluctuación se sitúa actualmente en 10 puntos diarios, el beneficio máximo posible será de 500$ por sesión (excepto en los atípicos días, estadísticamente irrelevantes, en que se produce un movimiento significativo y aprovechable de ida y vuelta). Ni que decir tiene que no existe sistema alguno capaz de retener de manera consistente una cantidad que se aproxime a este nivel teórico. De hecho, un porcentaje superior al 40% sería un claro indicio de sobreoptimización o fraude manifiesto.
Antes de decantarnos por alguna alternativa veamos, ayudados por bonitos gráficos, como está la situación.
Para empezar, contemplemos el progresivo deterioro del effective range en el E-mini S&P durante la última década:
Los afortunados poseedores de estrategias intradiarias capaces de sacar al menos un 20% del ER, vivieron su época dorada entre los años 1998 y 2002. Posiblemente, durante todo el 2003 y buena parte del 2004 asumieron disciplinadamente sus menguantes beneficios y su creciente drawdown en la esperanza de tiempos mejores.
Hacia la segunda mitad del 2004 muchos de ellos abandonaron el ruedo con heridas difíciles de restañar o, en el mejor de los casos, reflexionaron sobre el cambio de escenario y buscaron alternativas más prometedoras.
...El célebre aforismo de que la vida media de un day-trader no pasa de un año es, sin duda, aplicable a esta época.
Algunos “visionarios” volvieron con sus menguadas carteras al trading discrecional, otros comenzaron a identificar la raíz del problema y obraron en consecuencia: De hecho, durante el 2005 -y hasta hoy- el volumen del Russell 2000 no ha parado de aumentar, al tiempo que aparecían novedosas estrategias automatizadas (algunas basadas incluso en el problemático arbitraje S&P <> RL, ) para este índice de empresas de pequeña capitalización.
Paralelamente, el interés de los desarrolladores y usuarios de sistemas se ha ido diversificando hacia el Forex, los sistemas sobre acciones y los mercados de materias primas; los cuales, por diferentes motivos, constituyen aún el último refugio de esta modalidad de trading. ¿Por cuánto tiempo? ...Quien sabe. La “trilladora mecánica” no deja de aplanar los mercados a un ritmo creciente y, por ventanuco de las “profit opportunities”, a penas pasa un errático hilillo de luz.
En mi opinión, se está verificando de manera lenta pero inexorable el oráculo del Random Walk, que define el comportamiento de los mercados maduros y muy líquidos precisamente por su imposibilidad de obtener beneficios extraordinarios empleando cualquier ardid imaginable. Los estrategas y sus máquinas de hacer dinero saltan de unos productos a otros; huyen como Edipo de las palabras de la Sibila, esperando que el vaticinio no les alcance. Pero es, en definitiva, su lento caminar el que hace que la profecía se cumpla.
En el siguiente gráfico observamos lo obvio; la estrecha relación entre VIX y
Effective Range en el S&P:
Vemos como la ventana de oportunidades de beneficio (al menos para el Day-Trading) no ha dejado de menguar entre los años 2002 y 2004. Desde entonces la curva del VIX permanece estabilizada en un estrecho rango lateral (10-18 puntos) que coincide con un rango efectivo inferior a los 3.000$ para un contrato del S&P (800$ para un mini).
La situación en el futuro del NASDAQ es similar, salvo por el hecho de su abrupta caída desde un pico máximo de 5.400$ (contrato mini) -alcanzado en los meses previos a la explosión de la burbuja “punto.com”- hasta situarse, a finales de 2002, por debajo del rango efectivo del S&P. Cuestión verdaderamente inaudita, sobre la que reflexionaremos en posteriores artículos.
Y entre tanto, ¿Qué ha ocurrido con el Russell 2000? Pues que no ha dejado de crecer en volumen de contratación, volviéndose cada vez más atractivo a medida que S&P y ND estrechaban su potencial intradiario de beneficios. Si hacia el 2003 era muy infrecuente encontrar operadores sistemáticos interesados en este mercado, debido fundamentalmente a los mayores deslizamientos en la colocación de órdenes, actualmente los principales desarrolladores e intermediarios ofrecen numerosas estrategias automatizadas para operar con los futuros de este índice.
El motivo está muy claro y se deduce rápidamente del gráfico superior: Si actualmente el rango intradiario entre el E-mini S&P y el E-mini Russell 2000 es similar (unos 10 puntos) y los intermediarios cobran comisiones idénticas por cada contrato, ¿qué motivo hay para no operar en un mercado que ofrece un ER 2:1 con respecto al S&P? Un Day-Trader que disponga de un sistema capaz de retener un 20% del ER puede aspirar hoy a unos beneficios potenciales de unos 200$ por operación, frente a los raquíticos 100$ del ES y los aún menores 60$ del NQ. Ya hemos visto que el volumen creciente del E-mini Rusell 2000 permite reducir hoy día bastante el slippage. Si para una operación cerrada el deslizamiento medio en el más líquido ES se come unos 12$, en el caso del MR bien podríamos tolerar un deslizamiento del doble y aún así saldríamos ganando.
...Pues bien, una vez servidos los licores, que continúe la fiesta mientras el número de invitados no desborde el aforo de la carpa. ¿Durará esto? Claro, como poco de seis meses a un año. Transcurrido el cual el volumen de los futuros sobre el Russell 2000 a buen seguro habrá vuelto a doblarse y la “trilladora mecánica” reforzará su eficiente labor de aplanamiento.
El gráfico inferior muestra la evolución en el tiempo de los tres mercados de futuros (contratos mini) bajo el prisma de las “profit opportunities”:
Por último, para comprobar lo dicho en este artículo, me he permitido realizar un experimento (controvertido y a pequeña escala) sobre el rendimiento de una cartera de conocidos sistemas que operan en el S&P desde hace algunos años y cuyo beneficio anual puede consultarse bien en los
website de los desarrolladores, bien en portales especializados en la evaluación y/o gestión de sistemas como
Futures Examiner o
Trade Center.
He de confesar que el trabajo ha sido francamente difícil: Inicialmente me propuse evaluar una cesta compuesta por los diez mejores sistemas de la lista
Top 10 S&P Systems elaborada por la conocida publicación
Futures Truth Magazine. Sin embargo, ante la imposibilidad de conseguir datos históricos fiables (en los que por ejemplo, quedase claro si son hipotéticos o reales) no tuve más remedio que abrir el abanico de la muestra también a otros sistemas menos conocidos.
Finalmente, la composición de la cartera ha quedado reducida a los siguientes ocho sistemas: R-MESA 5, Adaptive S&P, R. Breaker, SPS DayTrader PAE, Swinger2001, RC.Swing88, Compass, SwingerDT2.
No todos los sistemas son intradiarios puros. He incluido algunos sistemas tipo
Swing ya que, en mi opinión, los efectos de la reducción del
effective range son aplicables a cualquier estrategia
Short Term del tipo que sea: Microtendencial, reconocimiento de patrones, ruptura de rangos, bandas de Bolinger, osciladores exóticos, redes neuronales, etc.
En fin, este es el aspecto que ofrece el rendimiento anual de nuestra (posiblemente arbitraria) cartera de sistemas:
Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Bueno, pues esto es lo que hay.
Sin duda habrá quienes piensen que esta precipitada selección de sistemas no es suficientemente representativa y contiene numerosos sesgos. Posiblemente tienen razón. Pero mi objetivo era ilustrar un proceso más que cuantificar una tendencia que, a gran escala, como ya hemos dicho, se viene manifestando por el progresivo abandono de los sistemas intradiarios puros, al menos en los productos mencionados.
Alternativas:
- No operar en mercados cuyo rango efectivo actual esté por debajo de la capacidad de generar beneficios del sistema.
- En igualdad de condiciones (comisiones, liquidez, garantías...) elegir los mercados cuyo rango efectivo nos sea más favorable.
- Si opera en futuros sobre índices americanos el Russell 2000 es, hoy por hoy, la mejor opción. Pero cabe presumir que esto no durará mucho.
- Los mercados de materias primas, bonos y divisas son una buena opción. El FOREX está muy de moda, pero tambien evidencia síntomas de saturación.
- Los sistemas sobre acciones son otra posibilidad. Sin embargo, en carteras pequeñas las mayores comisiones pueden llegar a ser un problema.
- Alternar el trading sistemático y discrecional también nos parece una alternativa razonable.
- En otros artículos de esta web se ha dicho que una cartera de sistemas bien estructurada es un adecuado instrumento de diversificación, en el contexto de un capital gestionado que incluya diferentes instrumentos de inversión con horizontes temporales, riesgos –y, lógicamente rentabilidades– muy distintos.
Andrés A. García.
© Tradingsys.org, 2006.